“Las cifras son escalofriantes, cada día nos enteramos por los medios de comunicación masivos de numerosos casos de mujeres violentadas de todas formas, sin embargo la mayoría de estas situaciones de violencia que sufren las mujeres en Argentina y el mundo, no llegan a los medios de comunicación y están naturalizadas en el seno de nuestra sociedad aún patriarcal” explicó Angriman. La Secretaría Nacional de Igualdad de Género y Oportunidades de la CTA sostiene que cada caso de violencia refleja una triste y preocupante realidad que atañe a la sociedad en su conjunto.

Desde marzo de 2009 Argentina cuenta con la Ley 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los Ámbitos en que se Desarrollen sus Relaciones Interpersonales. Dicha ley aborda todos los tipos de violencia: física, psicológica, sexual, económica y simbólica.

"Hay que terminar con el modelo patriarcal y con la violencia hacia la mujer en todo el país. Y para eso necesitamos una CTA movilizada para decir BASTA!!!!. Pero también que la actual “Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres contra la Violencia” no sea una letra muerta y tenga un presupuesto adecuado para que las mujeres puedan tener donde ir a denunciar abusos-violencia, que puedan recibir consejería sobre sus derechos, que tengan redes de servicios de salud y cuidado integrales, entre muchas otras necesidades. Sin duda necesitamos la participación, el compromiso y el convencimiento de los “compañeros varones“ que el tema de “la violencia contra la mujer” los involucra, interpela y que deben militar para erradicar estas acciones de nuestra sociedad y en las prácticas de nosotros mismos que marcan la desigualdad social en cuanto al género", explicó Alejandra Angriman, Secretaria de Género de la CTA nacional.

En julio de este año, 16 meses después de su sanción, la Ley finalmente fue reglamentada. Tanto la Ley como la reglamentación enumeran en detalle muchas de las formas de la violencia de género, sin embargo no contemplan ninguna sanción contra quienes la cometan. Asimismo, precisan las condiciones en las que las víctimas podrán acceder gratuitamente a la Justicia y a la atención de su problema, junto con los hijos e hijas que vivan con ellas, aunque en este caso tampoco prevé los fondos con los cuales enfrentarán las consultas y asistencias necesarias.

A pesar de la letra de la norma, Alejandra Angriman asegura que “la contracara de esta Ley es la ambigüedad a la hora de otorgar el financiamiento necesario para el efectivo funcionamiento del Consejo Nacional de las Mujeres, órgano de aplicación de la norma, que cuenta con 28 personas a cargo para garantizar una estructura de carácter nacional”.

“Destacamos el incansable compromiso de las organizaciones de mujeres que trabajan todos los días en la construcción de igualdad y justicia y en la lucha por hacer visible las situaciones de violencia. Así como la Ley y la reglamentación fue fruto de la larga lucha de estas organizaciones, también de nosotras depende hacerla cumplir” exclamó Alejandra Angrima, Secretaria Nacional de Género e Igualdad de Oportunidades de la CTA.
En este sentido Angriman aseguró que “tendremos que seguir exigiendo que esta Ley pueda ser implementada garantizando sus condiciones presupuestarias como así también la debida protección a las mujeres que muchas veces se encuentran obstruidas por el miedo a lo que les pueda pasar luego de ejercer “sus derechos”.

Por su parte, las compañeras de la CTA, en cada territorio serán protagonistas de concentraciones, actos y movilizaciones que tienen como objetivo poner en evidencia la gravedad de la violencia de género y aportar a la lucha por los derechos de las mujeres.