Hacia el Octavo Congreso Nacional de Delegados de la CTA
ANTE LA PRETENDIDA UNIDAD DEL SINDICALISMO MUNDIAL
Frente al dominio mundial de las grandes corporaciones que imponen
modelos y políticas que acentúan la desigualdad, la pobreza
y el hambre, se requiere la UNIDAD de todos los sectores
del movimiento obrero y de los trabajadores para enfrentar este
orden de injusticia y alumbrar un nuevo tiempo para la humanidad.
La unidad es prioritaria e imprescindible para plasmar una nueva
sociedad que encarne los valores de la igualdad, la justicia social, la
libertad, la democracia, la solidaridad y la paz entre los pueblos.
Estos objetivos, que compartimos millones en el mundo, requieren
no sólo de la unidad y articulación de las organizaciones sindicales
preexistentes, sino la construcción de nuevas institucionalidades
que organicen y expresen a los vastos contingentes socioculturales
excluidos por el depredador avance capitalista. No es esta, sin
embargo, la "unidad" que se nos propone en la denominada Confederación
Sindical Internacional (CSI).