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Hacia el 8º Congreso de la CTA Año 2007 Aporte de difusión
El Movimiento Político Sindical Liberación y el Movimiento Territorial Liberación frente a las tareas para la construcción del Movimiento Político, Social y Cultural resuelto por el Congreso de la Central de los Trabajadores de Argentina (CTA).
Nuestro Movimiento, como parte orgánica, también ha contribuido con su actividad práctica, en consonancia con las resoluciones de los órganos pertinentes, a la construcción de ese balance rico capaz de mostrar el grado de referencialidad conquistado por la CTA, todo lo cual hace aún mas paradójico la todavía subsistente negación oficial de su personería gremial. Ahora queremos referirnos a un aspecto puntual y muy trascendente que constituirá una actividad decisiva de la Central para el próximo período. Como es sabido, se ha puesto en marcha un proceso nacional que, según lo aprobado por su Dirección, sería el camino que llevará a materializar la resolución congresal referida a la vertebración del Movimiento Político, Social y Cultural. La aprobación de esa resolución porque está en línea con la impostergable necesidad de construir un nuevo Movimiento Histórico de carácter liberador y de representación política genuina de un basto sujeto social que involucra a los trabajadores y a sectores medios de la ciudad y del campo víctimas de la dominación neoliberal al servicio del capital concentrado y trasnacionalizado. Es decir, nuestros verdaderos enemigos. Nuestro Movimiento, que constituye una corriente de pensamiento histórico en el seno de la clase y trata de inspirarse en sus mejores tradiciones, ha sostenido desde la propia fundación de la CTA, el objetivo de contribuir a fundar un Movimiento amplio y de contenido programático profundo apto para cambiar las correlaciones de fuerza y enfrentar con éxito a las clases dominantes responsables de la destrucción de nuestro País y de la miseria que padece nuestro pueblo. La construcción de tal fuerza es necesaria y sobre todo posible, pero el paso inicial -a nuestro juicio- es definir claramente el carácter de dicho movimiento, es decir, si se propone la superación del capitalismo o se trata de someter a este sistema superexplotador tan sólo a reformas cosméticas. Y, conforme a nuestro modesto entender, precisamente eso es lo que aún no se plantea con claridad en el documento que será sometido a la consideración del próximo Congreso. Hoy resulta mas necesario que nunca debatir cómo aportar a resolver la crisis de alternativa política que falta en el país, cómo la Central contribuye a la conformación de un gran frente popular de carácter antiimperialista con voluntad y fuerza para destruir el actual sistema de dominación y con vocación de construir una sociedad superadora, mas humanista, solidaria y fraterna. Para nosotros, una tal sociedad sólo puede ser de naturaleza socialista. En abril de 2004, la conducción de la CTA convocó a una reunión plenaria del Confederal que en su «Despacho Político» muy justamente sostuvo: «hablamos de construir una nueva coalición política y social representativa de los intereses de las mayorías populares que sustituya aquellas viejas corporaciones políticas cuyas prácticas han sido repudiadas por nuestra sociedad. Un verdadero Movimiento Político, Social y Cultural de liberación que haga realidad los anhelos de justicia, democracia y soberanía enarbolados por nuestra Central y que anidan desde siempre en la mente y el corazón de nuestro pueblo». Esta definición política establece bases sólidas para debatir el contenido del nuevo Movimiento y en consecuencia, proponemos que las tareas de construcción comiencen a partir de estos niveles de definición, ya que nos ayudará a caracterizar mejor a nuestros enemigos y sobre todo a acertar hacia donde enfilamos el rumbo político de la Central. Debemos considerar que el nuevo Movimiento a construir debe ubicarse por fuera de cualquier eje falso reducido a la ecuación oficialismo-oposición. Se trata de moldear un instrumento que exprese una nueva identidad, superadora de las existentes, pero a la vez contenedora y síntesis de las mismas. Por esa razón, entre otras, entendemos que el esquema organizativo que se adoptó para propiciar el desarrollo hacia el Congreso Popular de la Constituyente Social, se considere como un cuadro inicial ilustrativo susceptible de ser modificado o enriquecido en el desarrollo del debate de carácter nacional. Somos de opinión que también sería valioso analizar durante el proceso de construcción, las ideas expuestas en el Documento Fundacional del Encuentro por la Soberanía Popular cuyos objetivos siguen siendo válidos y fueron elaborados por un espacio político-social que en su momento también integraron importantes dirigentes de nuestra Central. Lo proponemos convencidos que será un importante aporte al debate. Asimismo, nos parece sumamente interesante tener en cuenta las definiciones expresadas por el compañero Secretario General de la CTA en el plenario de Secretario Generales (4/5/07) donde afirmó: «Nosotros sabemos que enfrentamos una etapa de cambio, que en nuestro país se da en el marco de grandes contradicciones. Esto sucede en una sincronía en la región de América Latina, y el mundo está pendiente de lo que ocurre aquí. Se trata de un momento de transformación social. Chávez lo define como el socialismo del Siglo XXI, otros lo definen como el pos capitalismo, es decir, lo que tendría que venir después de este capitalismo salvaje, si somos capaces de construir las correlaciones de poder que hagan posible este tránsito hacia una sociedad en donde podamos volver a plantear la regeneración de lazos solidarios» Y también lo dicho por el compañero Secretario de Relaciones Institucionales, quien luego de afirmar con razón que si «el congreso del año pasado no hubiera ratificado la autonomía plena, ni para someternos a ningún gobierno ni cometer la imprudencia de decir que este gobierno es igual a todos los anteriores, evidentemente no hubiéramos podido llegar a tener hoy esta potencialidad» a renglón seguido sostuvo que «nadie se va a arriesgar sino discute adonde va. O es fe y hay que delegar o hay que explicitar una construcción». De eso se trata precisamente, explicitar desde el inicio el carácter liberador, unitario, antiimperialista y latinoamericanista del movimiento que queremos construir. En síntesis: la Constituyente Social (más bien política, social y cultural) la entendemos como un camino para acumular fuerzas en la perspectiva de construcción de alternativa popular de gobierno y de poder. Alternativa construida desde abajo, ubicando al verdadero enemigo: el capital concentrado y su instrumento político la derecha que marcha aceleradamente a su mayor articulación. Definir su objetivo estratégico: edificar una sociedad mas humana, democrática y participativa de carácter anticapitalista. Ese es un camino, pero no el único, debido a la fragmentación que sufre el campo popular. Por lo tanto se deben buscar coincidencias con otras experiencias político-sociales que se propongan similares objetivos relacionados con la construcción de alternativa al sistema. La Central, como organización de la clase mas interesada en los cambios debe jugar un rol decisivo en la articulación de los diversos espacios en que actúa el sujeto social «pueblo» necesitado de una nueva representación política. Por eso todos debemos aportar esfuerzos a fin de que el justo, posible y necesario nuevo Movimiento Político, Social y Cultural de carácter liberador se transforme en una realidad para bien de todos los trabajadores, del campo popular y de nuestra Patria en marcha hacia su Segunda Independencia. La propuesta de Paritaria Social, tenemos entendido que va en la misma dirección, es decir, acumulación de fuerzas accionando en común con otras organizaciones sociales y tratando de arrancar conquistas vinculadas en lo esencial a hacer posible una mas justa distribución de la riqueza. En ese sentido, como señalamos anteriormente, compartimos el informe contenido en la Memoria del Bloque Organizativo Gremial, particularmente cuando define «la necesidad de disputar en el marco de nuevas relaciones de fuerza a nuestro favor, un modelo distinto de producción, de distribución, de acceso a los servicios sociales» lo cual «nos pone en la obligación de decir que hacemos nuestras y asumimos como propias todas las acciones que llevan a cabo nuestros compañeros en cada lugar del país», afirmando a continuación que debemos garantizar «con nuestra participación, que no se concrete un diálogo social sólo con algunos que compartan una gobernabilidad de la injusticia social, sino un nuevo modelo productivo, distributivo y social a nuestro favor. LA CTA Y LA NUEVA CENTRAL SINDICAL INTERNACIONALEl 3 de noviembre de 2006 concluyó en Austria el congreso fundacional de la Confederación Sindical Internacional (CSI). Quiere ser presentada como «nueva» pero en realidad se trata de una fusión de las existentes CIOSL (Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres, una unidad entre la social democracia europea y el sindicalismo gerencial de los EE.UU.) y la demócrata cristiana CMT. (Central Mundial de Trabajadores). Mejor dicho, en esencia, lo que ocurrió es que la CIOSL absorbió a la CMT y a la CES (Confederación Europea de Sindicatos). A tal punto es así, que Guy Ryder, ex funcionario de la OIT y secretario general de CIOSL, fue electo como máxima autoridad de la CSI. El programa aprobado no difiere mucho del que tenía la CIOSL como expresión reformista basada en la conciliación de clases, por eso, no resulta extraño que llame a «humanizar la globalización» sin cuestionar la lógica explotadora del capital y convoque a priorizar la actividad de la CSI en los organismos multilaterales como el FMI, el BM y la OMC (Organización Mundial del Comercio). Por eso tampoco llama la atención que no haya una sola palabra de condena al imperialismo por la guerra de Irak, Afganistán, Líbano y Yugoslavia, no repudia la criminal agresión sionista al sufrido pueblo Palestino, no rechaza el bloqueo a Cuba e ignora la flagrante violación a los derechos humanos que en todo el mundo capitalista lleva a cabo el imperialismo norteamericano y sus aliados. CARÁCTER DE LA CSIHay que reconocer que esta nueva central nace en medio de grandes contradicciones y crisis que afectan profundamente a la clásica organización sindical, no sólo porque ha perdido su influencia y credibilidad a tal punto que la tasa de sindicalización mundial llega tan sólo al l9% de la masa laboral, sino también porque ha cambiado sustancialmente la composición social de la clase, se han incorporado millones al trabajo informal, los jóvenes dentro de la globalización capitalista carecen de futuro cierto, ha crecido notablemente la cuestión de los migrantes y refugiados y se han incorporado a los reclamos temas vinculados a la ecología, la defensa medioambiental, de género, etc. A todo esto, hay que sumarle la incapacidad que muestran las organizaciones clásicas corporativas para luchar por la construcción de verdaderos instrumentos políticos que disputen poder y sean capaces de convertirse en auténticos valladares que impidan el avance de la opresión social y la depredación civilizatoria capitalista. Otro gran tema que cuestiona los cimientos de la CSI es su carácter discriminatorio, ya que basándose en una definición «democrática» propia de la época de la guerra fría y de la «defensa del mundo libre, occidental y cristiano», deja afuera a organizaciones como el ACFTU LA PARTICIPACIÓN DE LA CTA EN ESTE PROCESOEn el informe de la Secretaría de Relaciones Internacionales que se pondrá a consideración del Congreso, se afirma que fue oportuna la participación de nuestra Central, ad-referendum del próximo Congreso, del fin de «una división casi centenaria». Nosotros pensamos que hubiese sido más aconsejable, al no existir un mandato expreso, no firmar el acta fundacional tal como lo hicieron, entre otros, la CGTP de Portugal, la CGTP de Perú y la PIT-CNT de Uruguay. No nos debe seducir el canto de sirena que pregona la unidad por la unidad misma, sino para qué deseamos la unidad y cual es el contenido de la misma. El problema es que ese amontonamiento financiado con dineros de la AFL-CIO, central norteamericana (que a su vez proviene de “fundaciones” solventadas por las multinacionales) y que sirve para promesas, chantajes y compra de voluntades, solo pretende poner a tono la organización internacional de los trabajadores con las exigencias de la globalización neoliberal. Es decir, un mercado mundial con trabajadores disciplinados que asegure la reproducción ampliada del capital y la tasa de ganancias a escala global. No en vano, la principal preocupación de la reciente CSI, como afirmamos anteriormente, es priorizar su actividad en los organismos multilaterales (que conduce el capital imperialista concentrado) como el FM. El BM, la OMC, etc. LA ACCIÓN PRO IMPERIALISTA Y ANTIOBRERA DE LA CIOSLEs claro que para poder llevar adelante los planes que se fijaron los dirigentes de la CIOSL y de la socialcristiana CMT, en primer lugar tuvieron que aplicar a fondo una política discriminatoria de tipo macartista, por eso no dudaron en dejar afuera a todas las organizaciones que señalamos precedentemente, aunque primero pretendieron seducir a algunas. Es evidente que una Central como la fundada en Viena en noviembre de 2006 no es la que necesitamos en esta época los trabajadores dada la actual situación en el mundo, con la profunda crisis capitalista que expone a la humanidad al hambre, la desocupación y la guerra, pero también atendiendo al rico y brioso proceso latinoamericano que va imponiendo un nuevo curso de carácter liberador y antiimperialista, instalando un debate post-capitalista (Socialismo del Siglo XXI) en donde la clase obrera juega un rol preponderante junto a nuevos y antiguos movimientos sociales a los que habrá que tener en cuenta para la construcción de un nuevo modelo sindical amplio no corporativo. Por lo tanto, resulta insoslayable la búsqueda de un camino que nos permita a los trabajadores de esta parte del mundo acompañar este proceso tratando de asegurar una radicalización del mismo. Este objetivo, según nuestra apreciación, tampoco podrá ser abordado por la futura central a fundarse en Panamá en marzo del 2008 (Central Sindical Americana - CSA), ya que será el brazo regional de la CSI y surgirá luego de la autodisolución de la tristemente célebre ORIT (a la que pertenece la CGT) y la CLAT, que son las regionales de CIOSL y CMT. Nuestra propuesta es que la CTA mantenga su autonomía frente a cualquier central internacional e intensifique las relaciones fraternas con todas desde su propio perfil independiente, acentuando una línea americanista solidaria con los procesos de cambios y de condena al brutal bloqueo a la Cuba revolucionaria. FORO O ENCUENTRO LATINOAMERICANO DE TRABAJADORES: UNA HERRAMIENTA DE CLASEPor eso sugerimos que, al margen de cualquier pertenencia a centrales internacionales, es oportuno, posible y necesario, acordar una suerte de autoconvocatoria de las diferentes centrales nacionales a fin de encontrarse en un foro para debatir programas de acción en correspondencia con el nuevo escenario constituido en el continente latinoamericano y para contribuir también a la conformación de alternativas políticas que, preservando las diferentes identidades étnico-culturales de carácter nacional, sean aptas para protagonizar una gesta integradora que involucre a todos los trabajadores y a los pueblos de latinoamérica. Y nuestra CTA, que es cada vez mas reconocida internacionalmente y acumula autoridad ética y calidad organizativa, está en condiciones de jugar un rol convocante para materializar ese objetivo. Si se produjera un evento de esa naturaleza o similar, se convertiría además en un poderoso estímulo para reabrir un debate acerca de la constitución de una verdadera internacional clasista que eche por tierra los planes urdidos por las patronales multinacionales que constituyen el verdadero poder globalizado. Buenos Aires, octubre de 2007 También en Congresos CTA (FeTERA SEMANAL N° 501 02.04.09). La Comisión de Resoluciones Especiales puso a consideración del Noveno Congreso Nacional de CTA y obtuvo la aprobación de los distintos despachos que los congresales presentaron en las dos jornadas del Congreso. Jornada Continental en Defensa del Empleo (FeTERA SEMANAL N° 501 02.04.09). El martes 31 de marzo/09, en Buenos Aires, Capital Federal, la CTA Nacional realizó una Jornada Continental de movilización hasta el Ministerio del Trabajo. La FeTERA formó parte del numeroso grupo de trabajadores, desocupados, piqueteros, que se dieron cita para exigir que la crisis no la paguen los trabajadores con "con rebajas de salario, más precariedad laboral, despidos y represión policial a los que luchan." Suplementos FeTERA 22 de abril: Jornada Nacional de movilizaciones y paros en todo el país (FeTERA SEMANAL N° 501 02.04.09). En el Noveno Congreso Nacional de Delegados de la CTA, se aprobó por unanimidad la realización de una Jornada Nacional de Movilizaciones y Paros en todo el país, para el 22 de abril. Suplementos FeTERA Refundar la Nación con el Protagonismo de los Trabajadores (FeTERA SEMANAL Nº 499 20.03.09). En la Universidad Nacional de la Matanza, el 20 de marzo/09, se realizó el 2do. Congreso Provincial Ordinario y el 4to. Congreso Extraordinario de la CTA Provincia de Buenos Aires. “Refundar la Nación con el Protagonismo de los Trabajadores”, fue la consigna que cobijó la realización de los Congresos Ordinario y Extraordinario de la CTA bonaerense. CRONOGRAMA DE LOS CONGRESOS PROVINCIALES DE LA CTA Y PROPUESTA DE LA FeTERA Hasta el 4 y 5 de diciembre, alrededor de 6.500 cuadros de la Central debatirán en los congresos provinciales éstos y otros temas que hacen a la singularidad de cada región, desde la óptica de clase. El 9 de noviembre/07, en la ciudad de La Plata, con la presencia aproximada de 2000 compañeros y compañeras se realizó el Congreso de la CTA de la Provincia de Buenos Aires. Las resoluciones tomadas en el seno del debate de las comisiones, una vez leídas, fueron aprobadas por unanimidad en algunos casos y por amplia mayoría en otros. DOCUMENTO SOBRE LA POLÍTICA INTERNACIONAL DE LA CTA La lucha de los trabajadores ya no puede ser concebida como un fenómeno que se agote en el espacio físico de las centrales nacionales porque hoy el capital está trasnacionalizado. El neoliberalismo no sólo implica la movilidad de los capitales de un lado a otro del planeta sino de empresas trasnacionalizadas que obligan, al movimiento sindical y a los trabajadores, a pensar en escenarios de lucha también mundiales. ANTE LA PRETENDIDA UNIDAD DEL SINDICALISMO MUNDIAL Frente al dominio mundial de las grandes corporaciones que imponen SINTESIS DE LOS DOCUMENTOS PARA EL DEBATE Con el objetivo fundamental de facilitar el trabajo en los Congresos, la CTA preparó una versión sintetizada de los documentos originales para discusión. Nuestra decisión es trabajar en la construcción de un Modelo Energético distinto, donde se reconozca, defienda y ejerza la soberanía energética. Para la CTA la energía es un derecho humano esencial, y como tal debe ser contemplado y concebido en el marco del conjunto de los derechos humanos esenciales. Los derechos del hombre definidos como las libertades primarias (el derecho a la vida, los derechos políticos) no se pueden asegurar mientras no se respeten los otros derechos irrenunciables como el derecho al trabajo, el acceso a la cultura, a la información, a la vivienda, al salario universal, al alimento, a la salud y a la educación. El ejercicio del derecho a la energía y al agua, como de todos los demás mencionados, necesita la formulación de un nuevo modelo de país, de una nueva estructuración social, de nuevas metas nacionales y regionales que implique un contrapoder a la hegemonía imperial del poder económico globalizante. |
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