(Agencia FeTERA 27.05.09). La FeTERA acompañó a los compañeros jubilados en su marcha 894. En su lucha que por más de 14 años, vienen dando; así también, formó parte de la elaboración del documento que sobre jubilación digna y movilidad se presentó al Director Ejecutivo del ANSES, Amado Boudou. Documento que exige a este organismo del Estado que funcione como un régimen de reparto solidario y no como un sistema de capitalización, que presta e invierte el dinero en distintos emprendimientos y que no garantiza el pago de las jubilaciones y pensiones sino que sirve para operaciones de salvataje de empresas y necesidades coyunturales del Estado o préstamo de dinero a sectores de mayor capacidad para financiar a grupos económicos y a sectores altos o medios con recursos.

Así también, se exige que los “recursos previsionales se utilicen para cumplir con los fines y derechos reconocidos por la Constitución Nacional y los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, para que todos los jubilados y pensionados tengan una vida digna.”

El Secretario de Organización de la FeTERA, Gabriel Martínez, afirmó que como trabajadores “vamos tomando conciencia de una organización en función de las necesidades e intereses de aquellos que no han gobernado, de aquellos que no han tenido el espacio para imponer sus necesidades como proyecto social.”

Al referirse al documento presentado al ANSES, indicó que éste “avala la necesidad de cambiar la ley jubilatoria, que retoma la necesidad del 82% móvil, que hace referencia al salario del trabajador en actividad. Es un mensaje que hay que llevarlo a cada uno de nuestros hogares, lugares de trabajo, en el barrio, entre los amigos, ya que es problema social de gran importancia”.

Continuó diciendo que “todos los trabajadores en relación de dependencia tenemos un problema en común, y ese problema se debe resolver en conjunto, con toda la clase trabajadora, porque las leyes no están hechas para satisfacer la etapa del jubilado. Es importante los miércoles de los jubilados, es importante dar a conocer este documento, es importante ganar a los trabajadores activos.”

Finalizó afirmando que este día de Paro Nacional de la CTA, “fue un día donde los trabajadores nos encontramos en la calle, y no nos encontramos solos, tuvimos la suerte de compartir un momento de lucha y construcción, exhibido públicamente con compañeros de otras organizaciones. Y desde ese punto de vista hoy, ganamos y en la medida en que podamos seguir manteniendo esto y que la relación de los compañeros más jóvenes con los jubilados se siga fortaleciendo”.

82% Móvil consigna de este Paro Nacional
En nombre de los jubilados, habló el compañero Marcos Wolfman, quien aseveró que el “paro de hoy tiene un contenido político profundo. Es un paro que tiene que ver con que este sistema capitalista descarga la crisis sobre los trabajadores, sobre los jubilados, sobre el pueblo trabajador. Con este paro queremos que la crisis la paguen los que lo provocaron. Además, este paro tiene como consigna el 82% Móvil, no es una consigna solo de los jubilados, es una consigna de los trabajadores. Se hace en los albores del bicentenario de nuestra Patria y está presente las ideas de Monteagudo, de Moreno, de Castelli, de Belgrano, está también presente en este 40 Aniversario del Cordobazo esas ideas del Gringo Tosco, las ideas que decían sindicalismo de liberación, sindicalismo de la clase obrera, no solo para luchar por las reivindicaciones. La clase obrera debe tener como objetivo luchar por el cambio de sistema, luchar por el poder. El sindicalismo de liberación es el camino con el cual se creó esta CTA.”

Invitó a seguir movilizados, a seguir marchando cada miércoles hasta lograr que se reconozca la inconstitucionalidad de la ley de movilidad.

  Texto del documento presentado al Director Ejecutivo del ANSES

Buenos Aires, 26 de mayo de 2009

POR UNA JUBILACIÓN DIGNA

82% MÓVIL

PLATA HAY !!!!

En nombre de los jubilados y pensionados, castigados que perciben una jubilación mínima, por debajo de la línea de la pobreza, que han visto rota toda proporcionalidad entre el haber previsional y el salario en actividad, nos dirigimos al Gobierno y a la ANSES para denunciar la situación que atraviesa el sistema previsional.

El régimen previsional argentino es un sistema de reparto solidario que tiene por finalidad esencial pagar con sus ingresos las prestaciones previsionales en los términos del art. 14 bis Constitución Nacional.

Desde que se eliminó el régimen de capitalización ANSES tiene recursos suficientes para pagar correctamente los haberes, restablecer la escala de proporcionalidad y el carácter sustitutivo de las jubilaciones respecto de los salarios, y fijar el 82% móvil como pauta de actualización.

Desde el 1/4/1991, en adelante, se congelaron las prestaciones previsionales, produciendo esta medida un deterioro importante en los haberes que impactó, en mayor medida, con la salida de la convertibilidad (01/2002).

Este deterioro no fue subsanado, ni por los gobiernos, ni por los fallos de la Corte, dado que estos últimos solo se aplican en los juicios individuales al negarse ANSES a generalizarlos a todos los casos similares.

En 1991, solo el 20% de los jubilados percibían el mínimo de $ 150, mientras que el 80 % cobraba una suma mayor; hoy la situación es prácticamente la inversa, el 80% percibe el mínimo de $ 770, y el 20% cobra por encima de ese valor. Claramente se puede apreciar que los jubilados y pensionados han sido sacrificados durantes más de dos décadas argumentando necesidades del Estado.

Anses fue desfinanciado deliberadamente, primero por la reducción de las contribuciones patronales y, luego, por la transferencia de los aportes de los trabajadores a las AFJP.

La eliminación del régimen de capitalización, hecho positivo, no ha servido hasta la fecha para mejorar la situación de los jubilados, por el contrario, se ha mantenido el atraso y envilecimiento en las prestaciones. Seguimos reclamando el reestablecimiento de las contribuciones patronales en su totalidad.

En la actualidad se obliga a cientos de miles de jubilados a realizar un juicio, durante años, para obtener en una sentencia lo que ya fue reconocido por la Corte, y los jueces en casos similares (Sánchez, Badaro, etc.). Mientras tanto asistimos a una disposición discrecional y arbitraria de los recursos de la ANSES, tanto para financiar al Estado, como a los privados.

En lugar de funcionar como un régimen de reparto solidario ANSES funciona como un sistema de capitalización, que presta o invierte el dinero en distintos emprendimientos. Se subvierten en forma deliberada los fines de la institución de la seguridad social. En vez de garantizar el pago de las jubilaciones y pensiones los recursos previsionales son invertidos en distintas operaciones de salvataje de empresas, necesidades coyunturales del Estado o préstamo de dinero a sectores de mayor capacidad económica de la sociedad. Es decir, los recursos de la ANSES –salario diferido de los trabajadores- sirven para financiar a grupos económicos y a sectores altos o medios con recursos. En ningún caso para mejorar la calidad de vida de los trabajadores o de los jubilados que no son destinatarios de esos préstamos.

Estamos en presencia de una práctica de solidaridad inversa, de los que menos tienen a favor de los que más tienen, o del propio Estado que mantiene un sistema tributario regresivo, en que, también, pagan más impuestos los que menos tienen.

Exigimos que los recursos previsionales se utilicen para cumplir con los fines y derechos reconocidos por la Constitución Nacional y los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, para que todos los jubilados y pensionados tengan una vida digna.

Decimos hay recursos en el sistema previsional. Hay recursos para elevar la jubilación mínima por encima de la línea de la pobreza y acorde con las necesidades de una canasta básica familiar; hay recursos para que se vincule la jubilación mínima con el salario mínimo vital y móvil, elevando los haberes inmediatamente a $ 1.600.; hay recursos para restablecer la proporcionalidad entre los haberes y el salario en actividad.

El dinero recuperado de las AFJP es dinero de los trabajadores, afectado a un fin solidario y de reparto, está siendo utilizado con fines diferentes, ni siquiera vinculados con los sectores de la sociedad de menos recursos, generando, además, incertidumbre sobre el futuro de todo el sistema previsional.

La realidad muestra que no se quiere cambiar esta realidad, para restablecer los derechos de los trabajadores activos y pasivos, el 82% móvil, vinculado con el salario en actividad, como derecho humano fundamental, darle autonomía económica y financiera al organismo previsional y establecer la administración de la ANSES por los trabajadores activos y jubilados, con participación del Estado.