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Estudios sobre Negociación Colectiva Por Observatorio del Derecho Social
[9/06/2008]
Principales conclusiones En términos generales, el patrón de la negociación colectiva durante el año 2007 repitió la tendencia fijada en los años anteriores, caracterizada por la siguiente dinámica: a. El contenido de la negociación continúa siendo mayoritariamente salarial. En el transcurso del 2007 la pauta establecida por el Gobierno Nacional (16,5%) operó como un piso, a partir del cual se negociaron distintos tipos de aumentos salariales. Sin embargo, ello no obstaculizó que en ciertas actividades (bancarios, industria del vidrio) se pactaran incrementos inferiores. Asimismo, persiste la presencia importante de pagos en conceptos de sumas no remunerativas (incluso en la negociación de escalas salariales) y una participación minoritaria de las comisiones internas y los delegados en las negociaciones colectivas desarrolladas en el ámbito de la empresa. b. El incremento de los niveles de la inflación durante el año 2007 diluyó gran parte de los incrementos salariales pactados en la ronda de negociación. Ello se verificó, por un lado, en el incremento de los conflictos detectado en el último trimestre del año; por el otro, en la negociación de bonificaciones por única vez o sumas no remunerativas hacia el final del año. c. En cuanto a la negociación de cláusulas no salariales, la presencia de cláusulas de flexibilización de la jornada (turnos, jornada promedio) y la organización del trabajo (polivalencia funcional) continúa registrándose en una gran cantidad de convenios colectivos. d. Por último, existe un crecimiento de la cobertura de la negociación colectiva sobre el conjunto de los trabajadores registrados. Sin embargo, la persistencia estructural de un amplio conjunto de trabajadores no registrados limita los efectos de una política estrictamente basada en la promoción de acuerdos y convenios colectivos. Con relación al Salario Mínimo, Vital y Móvil, durante el transcurso de este año se está repitiendo la dinámica iniciada en el año 2006, convirtiendo a dicha herramienta en una convalidación de los incrementos salariales negociados con anterioridad, y quitándole toda potencialidad sobre la elevación de los básicos convencionales. Finalmente, desde las organizaciones de trabajadores sólo podrá forzarse una modificación de la actual dinámica de la negociación colectiva y conflicto, y a través de ellos del patrón distributivo, mediante un crecimiento sindical, que se exprese tanto en una masiva sindicalización de los trabajadores no afiliados como, principalmente, en el fomento de la organización en el lugar de trabajo, a través de la designación de delegados y comisiones internas. En tal sentido, estimamos que los ejes para la acción deberían contener, entre otros, los siguientes aspectos: • Fortalecer las instancias de negociación paritaria, rechazando la imposición de techos a los incrementos salariales. Al respecto, adherimos a la posición sustentada por el Instituto de Estudios y Formación de nuestra CTA en tanto postula que una canasta básica para una familia tipo ronda los $ 3.000, por lo que el salario promedio debería establecerse en torno a $ 2.400 (80% de la canasta), con un salario mínimo, vital y móvil no inferior a $ 1.450 (60% del promedio) ; • Promover incrementos salariales superiores a los aumentos de productividad, única forma de garantizar una mejora del patrón distributivo; • Remover las cláusulas de flexibilización de la jornada y la organización del trabajo; • Impulsar la conformación de Comités de Salud y Seguridad en el Trabajo; • Combatir los procesos de tercerización en tanto herramientas de fragmentación de la clase trabajadora y, por ende, de debilitamiento de la acción sindical; • Reclamar el funcionamiento permanente del Consejo del Salario Mínimo que debería, entre otras cuestiones, fijar las pautas para la determinación de la canasta básica y establecer el SMVM con anterioridad al inicio de la ronda de negociación salarial; • Impulsar la declaración de la emergencia sindical, y promover una fuerte campaña de sindicalización y de designación de delegados y comisiones internas en todos los lugares de trabajo. También en Informes Sectoriales y Temáticos Convocatoria al Consejo del Salario Mínimo 2010 – Aportes para el debate La importancia estratégica del Salario Mínimo, Vital y Móvil Frente a la convocatoria al Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil Este informe, elaborado con el apoyo de la Fundación Ebert (FES), da cuenta de las principales características que asumió la negociación colectiva no salarial (específicamente la regulación de la jornada y la organización del trabajo) en los convenios colectivos de trabajo homologados entre 2003 y 2007, y efectúa una comparación con la dinámica negocial desarrollada durante los años 1991 y 1999. Modelo sindical y aportes obligatorios 2002-2006 El proceso de recuperación económica iniciado en el año 2003 en Argentina estuvo acompañado por un aumento en el ritmo de la negociación colectiva. La Negociación Colectiva Salarial en el 2006 El pasado 19 de diciembre más de 60 delegados y dirigentes de distintas asociaciones sindicales afiliadas a la CTA se reunieron en la ciudad de Buenos Aires para establecer políticas comunes de cara a la negociación de acuerdos y convenios colectivos de trabajo. El día 08 de Marzo del presente año 2006 se reunieron en Buenos Aires dirigentes y asesores letrados de sindicatos con personería gremial afiliados a la CTA y que hubieran firmado o negociado Convenios Colectivos de Trabajo. Los objetivos de la reunión fueron el compartir las experiencias en la materia y fijar políticas comunes con respecto al salario, condiciones de trabajo y la distribución de la riqueza. El encuentro, convocado en forma conjunta por el Bloque gremial, el Observatorio del Derecho Social y por el Instituto de Estudios y Formación de la CTA, fue el primero de una serie programada para dar cumplimiento de los objetivos señalados. |
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